La olla a presión

Este será un post desordenado y polémico. Inconcluso.

Tengo dos hijas todavía niñas pero no tanto como para no saber lo que es perrear. Ellas saben perrear.

Si yo hubiera querido perrear me habrían castigado.

A mí, a todas nosotras las de más de 35, nos enseñaron que no podíamos hacer cosas provocadoras porque los hombres, animalitos de dios, se excitan y son incontrolables.

En cambio nosotras no, nosotras somos las responsables, las que nos hacemos cargo, las que no perdemos la cabeza.

Después llegó internet, los celulares inteligentes y todo el “beboteo” que hace que no haya casi cuentas de mujeres solteras sin un culo a la vista en sus redes.

Con todo el porno del mundo a un click de distancia y mujeres cuya liberación sexual simplificó mucho las cosas, estos “animalitos de dios” viven excitados e incontrolables. Pobrecitos.

Y cuál es la solución entonces? Taparnos? Cortar internet? Castrarlos?

Los hombres son incontrolables porque nadie les enseñó a controlarse, ni en su casa, ni sus amigos, ni la sociedad.

Están acostumbrados a hacer lo que se les canta porque nunca tuvieron consecuencias negativas por pegar, por abusar, por no respetar. Al contrario. Se los festejaron. Ellos y ellas aplaudiendo al macho destructor.

Y por eso tenemos como sociedad una olla a presión. Tenemos una sociedad adicta sobreestimulada por un lado y represiva por el otro condenando eso que después consumen y hacen en negro, en doblefaz. El vivo, el canchero que las tiene todas. No importa si miente, si mata, si roba.

No tengo idea de cuál sea la salida a esta situación. Llevo años dedicada al aprendizaje de adultos, a entender cómo gestionar el cambio de paradigmas, a analizar cómo los mensajes forman la cultura que luego moldea la toma de decisiones de un cierto lugar.

Hasta que no encontremos la manera de diseñar incentivos negativos y positivos que fomenten formas más respetuosas de relacionarnos esto no va a mejorar, va a empeorar.

Hasta que ser mejor persona no sea mejor negocio que ser un chanta e ignorante no hay chances de que esto cambie. Mientras siga habiendo aplaudidores del doble faz y cómplices de la mentira todo seguirá igual.

Dije que iba a ser un post inconcluso. Parte importante de encontrar una solución está en definir bien el problema. En eso estamos.